La escuela favorece la apertura del alumno al mundo y asegura, junto con la familia, la educación global del niño. Tiene como objetivo el éxito individual de cada alumno, ofreciendo las mismas oportunidades a cada uno de ellos, asegurando la continuidad de los aprendizajes.
La escuela primaria proporciona al alumno los elementos y los instrumentos fundamentales del conocimiento: expresión oral y escrita, lectura y matemáticas. Le permite ejercer y desarrollar su inteligencia, su sensibilidad, sus capacidades manuales, físicas y artísticas. Permite la adquisición progresiva de conocimientos metodológicos y prepara al alumno para que siga en buenas condiciones la escolaridad secundaria.